Los principales productos de colza utilizados actualmente en alimentación animal son variedades de Brassica napus y campestris con bajo contenido en ácido erúcico (< 1% de la fracción grasa) y glucosinolatos (< 15 micromoles/g), denominadas variedades doble cero (o canola en Canadá). La concentración en proteína varía con el origen de la colza: 36-37% (Canadá), 35% (europea) y 38% (India, China); éstas últimas están contaminadas por crucíferas, por lo que su contenido en glucosinolatos es superior, y la digestibilidad de su proteína inferior.
El ácido erúcico es un ácido graso monoinsaturado de cadena larga (22 átomos de carbono), difícilmente oxidable por el animal y que tiende a causar problemas cardiovasculares por su deposición en el músculo cardíaco. Los glucosinolatos no son tóxicos por sí mismos, pero la acción de la enzima mirosinasa, presente en el propio grano, o de enzimas de los microorganismos del aparato digestivo, da lugar a la formación de productos de hidrólisis (isotiocianatos (ITC), oxazolidintiona (VTO) y nitrilos) que tienen efecto goitrogénico y reducen el consumo. Los niveles máximos recomendados de ITC y VTO son 3 y 6 mg/g.
Otro factor antinutritivo presente en la colza es la sinapina (0,6-1,8%), un éster de ácido sinápico y colina, de sabor amargo y responsable del sabor a pescado en huevos de estirpes rubias cuando la ración contiene más de un 0,1%. La utilización de productos de colza en piensos de monogástricos está también limitada por su contenido en fibra, lignina y taninos (1,6-3,1%). Los límites de incorporación podrían aumentarse usando harinas descascarilladas (colza triple cero), con menor contenido en taninos, fibra bruta, lignina y glucosinolatos y mayor contenido proteico (45%) y energético (alrededor de un 10% superior).
La colza tiene una concentración muy baja en almidón, pero un contenido apreciable de FND (28%) y de fibra digestible (7%), principalmente pectinas. La presencia de fibra soluble tiende a incrementr la viscosidad de la digesta y a reducir la digestión y absorción de los aminoácidos. La semilla entera tiene un nivel muy elevado (40%) de grasa rica en ácido oleico y linoleico. La proteína de la colza tiene una utilización digestiva alta pero inferior (alrededor de un 10%) a la de la soja. Su perfil de aminoácidos esenciales se complementa bien con el de los granos de leguminosas, por su elevada concentración en aminoácidos azufrados. Por ello, son frecuentes asociaciones colza/guisante o colza/habas en piensos de monogástricos. La colza (especialmente la harina) es una buena fuente de proteína indegradable. También es rica en S, Se, biotina, colina y niacina, aunque es deficitaria en Cu. Por su riqueza en fibra y ácido fítico (3-6%) la disponibilidad de Ca, Mg, P, Zn, Cu y Mn es baja.
La semilla entera de colza es un ingrediente adecuado en piensos de vacas de alta producción por su contenido en grasa, proteína y fibra digestible. Su empleo reduce la concentración en la leche de ácidos grasos de cadena corta y media y aumenta la de ácidos grasos de cadena larga (n=18 átomos de carbono). La utilización de semilla entera debe restringirse en rumiantes por el efecto negativo de la grasa insaturada sobre la digestión de la fibra.
La semilla requiere un mínimo de procesado físico en ganado vacuno para evitar que un alto porcentaje de granos (hasta un 50%) pasen indigeridos por el tracto digestivo. El procesado por calor disminuye la degradabilidad de la proteína. La extrusión puede facilitar la liberación del aceite e incrementar su interacción con la digestión microbiana. En cambio, se ha señalado que el tratamiento con vapor a 95ºC produce una encapsulación del aceite dentro de la proteína, protegiéndole de la acción de los microorganismos del rumen. El procesado por calor inactiva la mirosinasa, por lo que se reducen los efectos tóxicos de los glucosinolatos y mejora la digestibilidad de la energía hasta un 12%, dependiendo del tipo de tratamiento. La extrusión de mezclas de semillas de colza y leguminosas resulta interesante al actuar también sobre los factores antitrípsicos de éstas.
Los productos de colza son de fácil manejo en fábrica. La utilización de semillas enteras permite además la incorporación de grasa al pienso con menores exigencias tecnológicas que las fuentes puras de grasa. La información para el estudio de la variabilidad de muestras españolas es todavía bastante limitada.
Regresiones de predicción del valor nutritivo Aves:
Porcino:
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